Esta mañana, en el emblemático Palacio de Cibeles, la vicealcaldesa de Madrid y delegada de Seguridad y Emergencias, Inma Sanz, ha dado el pistoletazo de salida a la nueva Escuela Municipal de Salud. Con este lanzamiento, el Ayuntamiento de Madrid cumple un compromiso electoral, buscando centralizar y coordinar toda la actividad formativa e informativa en materia de salud a disposición de la ciudadanía. «Se trata de contribuir a mejorar la salud y calidad de vida de las personas y a hacer de Madrid una ciudad cada vez más saludable», afirmó Sanz.
La vicealcaldesa valoró la escuela como una plataforma poderosa destinada a ofrecer a los madrileños las herramientas necesarias para alcanzar su máximo potencial de salud. Este nuevo proyecto, aunque ya es una realidad, tiene un vasto potencial para crecer y alcanzar a más personas.
La entidad encargada de la gestión de la escuela será Madrid Salud, que, como ha destacado en numerosas ocasiones, transmite a los ciudadanos que gozar de buena salud depende de numerosos factores, desde la alimentación a las relaciones sociales o el entorno ambiental. Esta nueva escuela actuará como el puente necesario para acercar este conocimiento a la ciudadanía.
La plataforma cuenta con una página web (escuelamunicipaldesalud.es) que, en su fase inicial, ofrece más de 25 áreas temáticas organizadas en torno a siete ámbitos clave: hábitos saludables, bienestar emocional, prevención de enfermedades, adicciones, seguridad alimentaria y del agua, entorno saludable, y salud ambiental, además de animales de compañía y otros.
El proyecto arranca con más de 60 cursos, talleres y sesiones, tanto presenciales como online, distribuidos en los distintos centros de Madrid Salud en todos los distritos de la ciudad. Además, se pondrán a disposición más de 300 publicaciones y más de 100 vídeos y contenidos multimedia, accesibles a través de la web, para complementar la formación e información que se ofrece.
Uno de los pilares fundamentales de esta iniciativa es su cercanía a la población, a la vez que su capacidad de adaptarse tanto en formatos como en contenido. Para asegurar la relevancia de su oferta, la escuela contará con canales de participación ciudadana y herramientas para la detección de necesidades, como estudios, encuestas y análisis de solicitudes.
La escuela se inscribe dentro de una tradición de acciones formativas, informativas y de sensibilización hacia la población madrileña en temas de salud que se remontan a los años 80, con la creación de los centros de promoción de la salud y de atención a las adicciones. Así, como destacó Sanz, «la escuela es, por tanto, un paso más, decisivo, en una labor que está en el ADN del Ayuntamiento y de Madrid Salud».