Samsung Electronics, el gigante surcoreano, ha dado a conocer sus resultados financieros del segundo trimestre de 2025, mostrando una facturación de 74,6 billones de wones (aproximadamente 51,600 millones de euros) y un beneficio operativo de 4,7 billones de wones (unos 3,250 millones de euros). Aunque estas cifras representan un descenso respecto al trimestre anterior, Samsung sigue firme en su apuesta por el crecimiento en semiconductores, pantallas premium y ecosistemas móviles integrados con inteligencia artificial.
El sector de semiconductores de Samsung, bajo la división Device Solutions (DS), se posiciona como un pilar fundamental para el crecimiento futuro. Con ingresos de 27,9 billones de wones y un beneficio operativo de 0,4 billones, la recuperación del mercado de chips empieza a tomar forma, impulsada por la fuerte demanda de memoria para inteligencia artificial y las ventas de HBM3E, DDR5 y SSD para centros de datos. Sin embargo, los beneficios se vieron afectados por ajustes de inventario y restricciones de exportación a China.
A futuro, Samsung espera que la memoria para IA mantenga su solidez, impulsada por la inversión de los proveedores de servicios en la nube, y planea ampliar su oferta con soluciones como LPDDR5x, GDDR7 y su octava generación de V-NAND. Asimismo, busca mejorar la competitividad de Exynos y expandir su presencia en sensores de imagen de ultra alta resolución.
En el ámbito de las pantallas, Samsung Display Corporation (SDC) reportó 6,4 billones de wones en ingresos y un beneficio operativo de 0,5 billones. La demanda de pantallas móviles sigue creciendo, favorecida por lanzamientos de smartphones y sectores como IT y automoción, mientras que las pantallas de gran formato ven un auge en los monitores gaming con tecnología QD-OLED.
El negocio de la división Mobile eXperience (MX) registró ingresos de 29,2 billones de wones y un beneficio operativo de 3,1 billones. A pesar de una baja en las ventas de móviles tras el lanzamiento de la serie Galaxy S25, hubo un crecimiento interanual gracias a la popularidad de las series Galaxy S25 y Galaxy A. La firma se orienta hacia dispositivos plegables y la ampliación de inteligencia artificial en su gama, incluyendo nuevos formatos como los dispositivos XR y el Galaxy TriFold.
Por su parte, la unidad de Visual Display y Digital Appliances alcanzó ingresos por 14,1 billones de wones, con ventas destacadas de modelos Neo QLED y OLED, aunque enfrentando una demanda estancada y fuerte competencia. La estrategia para el resto del año incluye potenciar televisores premium con capacidades inteligentes y reforzar su ecosistema con servicios integrados como SmartThings y Art Store.
Enfrentando desafíos globales, Samsung apuesta por la inteligencia artificial, la recuperación en semiconductores y la diferenciación tecnológica como motores para el futuro. Con una inversión en procesos avanzados de fabricación de chips y dispositivos innovadores, la compañía busca consolidarse como líder en la era de la inteligencia artificial omnipresente.
