En el pasado mes de junio, los residentes de la calle Portilla y la vecina área de Siete Esquinas enfrentaron una inesperada interrupción en su servicio de telecomunicaciones. Durante las obras de construcción en una vivienda particular, se produjo un incidente que dejó a toda la zona sin acceso a la red de fibra óptica, un problema que se prolongó durante varios meses.
A pesar de que los habitantes afectaron se dirigieron de inmediato a Telefónica para solicitar una pronta reparación, el asunto no llegó a conocimiento del Ayuntamiento hasta agosto. En ese momento, el concejal de Innovación, Antonio Saldaña, tomó cartas en el asunto y comenzó a trabajar en estrecha colaboración con Telefónica y los vecinos para solucionar el contratiempo. Según Saldaña, «desde ese momento hemos estado trabajando mano a mano con Telefónica y los vecinos en una escucha activa para resolver este problema en el menor tiempo posible.»
La complejidad del problema no se limitaba a su resolución técnica. Las reparaciones requerían una licencia específica, un trámite que debía contar con la aprobación de la Dirección General de Patrimonio de la Comunidad de Madrid. Una vez gestionada la solicitud por parte del Ayuntamiento, la aprobación fue concedida en septiembre, lo que permitió acelerar el proceso. «Hemos mantenido comunicación por redes sociales, por WhatsApp e incluso hemos mantenido una reunión física con dos vecinos portavoces del resto, para que estuvieran informados de los pasos necesarios», explicó Saldaña.
Ahora, con los trabajos a punto de concluir, el concejal ha asegurado que el servicio de telecomunicaciones será restablecido «lo antes posible», subrayando la importancia de estas infraestructuras para la comunidad local. Los vecinos esperan que la inminente finalización de los trabajos marque el fin de un periodo de desconexión que se ha alargado más de lo que cualquiera podría haber anticipado.