En el debut de los blancos en la Champions League, el portero del equipo se erigió como la figura clave del encuentro, realizando paradas cruciales que mantuvieron al conjunto en la pelea. Kylian Mbappé abrió el marcador en los primeros minutos, dejando claro por qué es uno de los delanteros más temidos del mundo. Sin embargo, la respuesta no se hizo esperar, y Dennis Undav, con una definición precisa, empató el partido, generando tensión y expectativa entre los aficionados.
El momento decisivo llegó en un córner ejecutado con precisión quirúrgica, cuando el futbolista alemán se elevó en el área y anotó el gol que le dio la ventaja definitiva a los blancos. Posteriormente, el joven brasileño Endrick completó la faena con un certero remate, sellando el marcador en 2-1. Este resultado no solo aseguró una victoria importante, sino que también dejó en evidencia el carácter y la determinación del equipo en su camino por la competencia europea.
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