En la cuarta jornada de la Feria de Fallas en Valencia, el torero peruano Andrés Roca Rey brilló en la plaza, consolidándose como una figura indiscutible del toreo contemporáneo. Durante su primera actuación en la tarde del 15 de marzo, Roca Rey enfrentó a un toro de Victoriano del Río con gran destreza y valentía. Con el público fervoroso y cautivado, el matador demostraba su maestría manejando la muleta con precisión agotadora, realizando una faena que culminó con dos orejas y una salida por la puerta grande. A pesar de ciertos llamados al indulto del toro, se mantuvo la mesura y se otorgó de manera justa la vuelta al ruedo al excepcional animal.
El ambiente cambió al quinto toro, donde la bravura inicial se tornó en mansedumbre, dificultando una actuación similar para Roca Rey. Sin embargo, su compromiso no menguó, y aunque el toro no facilitó las cosas, el diestro supo manejar la situación con profesionalismo. Por su parte, Alejandro Chicharro tomó la alternativa con buena técnica ante el toro Alabardero, dejó pinceladas de calidad aunque sin la chispa necesaria para conmover al tendido. Finalmente, la discreta actuación de Alejandro Talavante contrastó con la del resto, pasando casi desapercibido en una cartelera que prometía más de su figura, cerrando una jornada marcada por contrastes en la emblemática Feria de Fallas.
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