En el partido inaugural del Mundial de Clubes, el empate entre el Inter de Miami y el Al Ahly egipcio estuvo marcado por un episodio tenso que involucró a Luis Suárez y Sergio Busquets. En el minuto 85, mientras el Inter trataba de aprovechar un tiro de esquina, Busquets se dirigió al árbitro, Alireza Faghani, con un contundente «you’re crazy», que fue acompañado de una señalización hacia su cabeza. Esta acción le valió una tarjeta amarilla por protestar de manera demasiado efusiva.
La situación se tornó más agitada cuando el portero del Al Ahly solicitó asistencia médica, lo que llevó a Suárez a instar a sus compañeros a ejecutar el córner rápidamente, a pesar de la negativa del árbitro. Esta insistencia provocó un nuevo brote de protestas por parte de los jugadores del Inter de Miami, intensificando un ambiente ya cargado en un partido que prometía ser más tranquilo. La confrontación entre los futbolistas y el arbitraje destacó la tensión y la competitividad de este encuentro inaugural en el torneo.
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