Durante una reciente intervención en la Comisión Mixta de Control Parlamentario, Manuel Mariscal Zabala, diputado de Vox, reafirmó su postura crítica hacia RTVE, sugiriendo que su partido podría adoptar una postura radical al respecto. Mariscal se refirió específicamente a la necesidad de despedir a presentadores como Jesús Cintora, a quienes acusó de lucrarse a expensas de los ciudadanos mientras desinforman y manipulan. A su juicio, los recortes en la televisión pública no se limitarían a los conductores de programas, sino que también se extenderían a tertulianos y colaboradores, lo que generó un amplio revuelo en el ámbito mediático.
En reacción a las declaraciones de Mariscal, Cintora y sus colaboradores, incluida la periodista Esther Palomera, recordaron el precedente de listas negras que Vox y el Partido Popular habrían implementado en el pasado. Palomera recordó su propia experiencia de ser expulsada de la televisión pública tras ser señalada en una de esas listas. En un tono provocador, Cintora respondió a los comentarios de Mariscal, sugiriendo que la molestia de Vox ante su presencia solo confirmaba la importancia de su trabajo en la televisión, evidenciando así la tensión creciente entre la política y los medios de comunicación en España.
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