En un contexto donde la limpieza del hogar es cada vez más prioritaria, un método innovador para mantener el horno de la cocina impecable ha captado la atención por su eficacia y sencillez. Según expertos, el proceso solo requiere agua caliente y una cápsula de lavavajillas.
El método es directo y económico. Se recomienda calentar una pequeña cantidad de agua hasta que esté caliente, pero sin alcanzar el punto de ebullición. Luego, se vierte en un recipiente apto para altas temperaturas y se añade una cápsula de lavavajillas. La combinación provoca una reacción que desintegra grasa y restos de alimentos adheridos a las superficies internas del horno.
Usuarios que han experimentado este procedimiento lo han compartido en redes sociales, alabando su simplicidad y la notable reducción del tiempo de limpieza. Además, subrayan su perfil ecológico al prescindir de productos químicos agresivos que pueden dañar tanto la salud como el medio ambiente.
Especialistas recomiendan este truco no solo para hornos, sino también para otros electrodomésticos y superficies con suciedad persistente. No obstante, advierten seguir las recomendaciones del fabricante para evitar posibles daños.
Este método versátil emerge como una opción preferida por aquellos que buscan soluciones domésticas prácticas y responsables. Transformando lo tedioso en eficiente, esta técnica se presenta como una innovadora estrategia que combina eficacia y sostenibilidad para el cuidado del hogar. Con solo dos elementos, es posible lograr una limpieza profunda y accesible.