La transición hacia un futuro de energía limpia está marcando una significativa expansión en la infraestructura solar, considerada una de las más grandes de la historia. Sin embargo, alcanzar los ambiciosos objetivos de emisiones netas cero requiere de métodos de construcción más rápidos y eficientes. La clave para lograrlo reside en la automatización y el uso de robots.
Según la Asociación de Industrias de Energía Solar (SEIA), solo en 2022, los Estados Unidos sumaron 12 gigavatios de capacidad solar a gran escala. No obstante, las proyecciones de BloombergNEF indican que será necesario instalar 358 gigavatios adicionales entre 2023 y 2030, con un repunte en la instalación anual que podría superar los 100 gigavatios hacia finales de la década. Este desafío presenta una gran dificultad: la falta de trabajadores suficientes y de tiempo para alcanzar el ritmo necesario, según afirma Gregg Wallace, socio de Building Ventures, una firma de capital de riesgo dedicada a la tecnología de construcción autónoma.
En este contexto, empresas como Built Robotics están a la vanguardia de la automatización en la construcción solar. Esta startup de San Francisco ha diseñado robots autónomos que pueden ejecutar tareas esenciales en proyectos solares, desde el levantamiento topográfico hasta la instalación de los pilotes que sostendrán los paneles solares. Su sistema promete aumentar entre tres y cinco veces la velocidad de construcción de los cimientos solares frente a los métodos convencionales. Para ello, ofrecen un kit que convierte equipos de construcción tradicionales de marcas como Caterpillar y John Deere en máquinas autónomas empleando cámaras, GPS e inteligencia artificial. Hasta la fecha, los robots de Built Robotics han contribuido a instalar más de 2 gigavatios de capacidad solar en el país.
Por otro lado, la empresa Ojjo está revolucionando el sector con un sistema automatizado de instalación de cimientos mediante tornillos huecos. Esta propuesta reduce a la mitad el acero y la mano de obra necesarios, lo que ya ha sido implementado en importantes proyectos como Eagle Shadow Mountain en Nevada y actualmente en Gemini, uno de los mayores proyectos solares de Estados Unidos.
La automatización en la construcción solar ofrece múltiples beneficios. No solo acelera y optimiza los tiempos de construcción, sino que también incrementa la seguridad laboral al minimizar la exposición de los trabajadores a entornos riesgosos. Además, permite que los operadores humanos se concentren en tareas más complejas y de mayor valor agregado.
La industria solar enfrenta un déficit en mano de obra calificada para satisfacer la creciente demanda. La automatización promete cerrar esta brecha, transformando el modo en que se construyen las plantas solares y haciéndolas más rápidas, seguras y sostenibles. Con empresas líderes como Built Robotics y Ojjo, la transición hacia un sistema energético descarbonizado se vislumbra como un objetivo cada vez más alcanzable, anotándose un hito en la historia de la innovación tecnológica y la energía renovable.