Madrid se ha convertido en la primera ciudad europea en disponer de imágenes termográficas de máximo detalle. Esta tecnología avanzada permitirá monitorizar en tiempo real la temperatura de sus calles, facilitando la gestión de episodios de calor extremo y optimizando el uso de sistemas de climatización en espacios públicos. La implementación de estas imágenes busca mejorar la calidad de vida de los ciudadanos mediante una mejor gestión de la infraestructura urbana y el medio ambiente.
Leer noticia completa en El Mundo.