La mayor fuga de metano registrada en un pozo petrolífero ocurrió en Kazajistán entre junio y diciembre de 2023, liberando 131.000 toneladas del gas de efecto invernadero, según un estudio del Grupo LARS del Instituto de Ingeniería del Agua y Medio Ambiente de la Universidad Politécnica de Valencia. El equipo de científicos rastreó y cuantificó la emisión con datos satelitales de diversas misiones y radiómetros. El accidente, que generó un cráter y un incendio, superó eventos anteriores en Estados Unidos. La investigación empleó nuevos métodos de procesamiento de datos, subrayando la importancia de tecnologías avanzadas para detectar emisiones en áreas remotas.
Leer noticia completa en 20minutos.