La Generalitat Valenciana ha expresado su frustración hacia el Gobierno de Pedro Sánchez, responsabilizándolo por la falta de aprobación de un Fondo de Liquidez Autonómico (FLA) extraordinario. Esta medida, esperada por la Comunidad Valenciana, ha sido un pilar económico durante los últimos 12 años para cubrir el déficit en su financiación. La situación actual marca la primera vez desde 2011 que no se ha recibido este respaldo, generando preocupaciones sobre la capacidad de la administración autonómica para cumplir con sus obligaciones económicas.
El impasse ha desatado una serie de reproches políticos entre ambas administraciones. Desde Valencia, se insiste en que el retraso pone en riesgo la estabilidad financiera de los servicios públicos esenciales, mientras que el Ejecutivo central no ha ofrecido una fecha clara para la resolución de este asunto. La tensión subraya la necesidad de revisar el sistema de financiación autonómica para evitar futuros conflictos y asegurar un reparto más equitativo de recursos entre las comunidades.
Leer noticia completa en El Mundo.