Las elecciones para elegir al alcalde y dos comisionados de Miami se están llevando a cabo en un entorno que combina una baja participación y un contexto político cada vez más dominado por el crecimiento republicano en Florida. Para la media tarde del día de votación, la participación apenas superaba el 17%, según cifras preliminares. En el centro de votación del parque Robert King, se observó un flujo constante y lento de votantes, sin largas filas. Los ciudadanos, como Jamie Fajardo, han mostrado interés en temas clave como la vivienda asequible y el medioambiente, apoyando a candidatos que abordan estas preocupaciones. Trece candidatos compiten por la alcaldía en un proceso oficialmente no partidista, pero el trasfondo político refleja el reciente giro republicano en Miami-Dade, tradicionalmente demócrata.
El actual alcalde, Francis Suárez, aunque no participa en la elección, ha mantenido notoriedad al haberse postulado brevemente como precandidato presidencial republicano. La contienda electoral en Miami también está marcada por los recientes escándalos políticos que han cuestionado la transparencia y ética del gobierno local. Acusaciones de abuso de poder, disputas entre comisionados y la remoción de carteles de campaña han sido algunos de los problemas que han exacerbado el escepticismo ciudadano. En respuesta, se estableció la Oficina del Inspector General en agosto de 2024 para mejorar la supervisión y fomentar la transparencia gubernamental. Además de Miami, otras ciudades del área como Hialeah y Miami Beach también realizan elecciones municipales, reflejando un periodo de significativo cambio político en la región.
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