Donald Trump ha regresado a Washington para su toma de posesión prevista para el próximo lunes 20 de enero, dejando atrás sus problemas legales y consolidando su posición con un comité de ceremonia que ha recaudado un récord de 150 millones de dólares. Empresas tecnológicas, tradicionalmente más cercanas al Partido Demócrata, como Microsoft, Google, Meta y Uber, han hecho significativas contribuciones económicas, reflejando un acercamiento inusitado al nuevo presidente. Trump ha recibido a líderes empresariales de alto perfil en su residencia de Mar-a-Lago, incluidos nombres como Mark Zuckerberg de Meta, Sundar Pichai de Google y Jeff Bezos de Amazon. Estas visitas refuerzan el respaldo corporativo con el que dispone mientras se prepara para asumir oficialmente su segundo mandato.
En esta ocasión, Trump llega con el respaldo absoluto de un Senado controlado por los republicanos, asegurando así la confirmación de sus nombramientos, incluido el de Pete Hegseth para secretario de Defensa. Planea comenzar su mandato con una serie de decretos enfocados en la seguridad fronteriza, un tema central en su campaña presidencial. Además, se han programado redadas de inmigración que darán inicio el martes posterior a su juramentación. En el contexto internacional, justo antes de su toma de posesión, se ha alcanzado un alto el fuego entre Israel y Hamás, destacando la liberación de rehenes capturados en octubre de 2023, un hecho que podría influir en la política exterior durante su administración.
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