El presunto intento de asesinato del expresidente Donald Trump en Florida ha desatado una tormenta de acusaciones y recriminaciones entre las filas republicanas y demócratas. Trump, en una entrevista con Fox News Digital, señaló que la retórica de la campaña demócrata, encabezada por Joe Biden y Kamala Harris, ha incitado a la violencia en su contra. El expresidente culpó directamente a sus oponentes políticos de fomentar un clima de odio que, según él, motivó a Ryan Wesley Routh a intentar asesinarlo. El detenido, quien ya había sido condenado por posesión ilegal de una ametralladora, fue capturado con un rifle AK-47 cerca de un campo de golf en West Palm Beach donde Trump se encontraba.
Estas declaraciones llegan en medio de una creciente tensión política y social en Estados Unidos. Por su parte, el equipo de campaña de Harris respondió condenando la retórica incendiaria y peligrosa de Trump, señalando las consecuencias reales que sus palabras pueden tener sobre las comunidades. Julie Chávez Rodríguez, jefa de campaña de Harris, enfatizó que los comentarios del expresidente no solo son divisivos, sino que también fomentan la violencia política. Esta escalada verbal se enmarca en un contexto de recriminaciones mutuas sobre la responsabilidad de alimentar el odio y la violencia en el país, con el presidente Joe Biden instando a rechazar el odio y acusando a Trump de incitarlo.
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