La empresa ha notificado a sus clientes mediante una carta la suspensión de operaciones en su planta ubicada en Murcia, justificando la decisión por razones de «fuerza mayor». Según el comunicado, esta medida responde a una situación «absolutamente anómala», aunque no se especifican los detalles exactos que llevaron a tomar esta determinación. La suspensión ha generado incertidumbre entre los clientes, quienes ahora enfrentan una interrupción en el suministro que podría afectar sus operaciones. La empresa ha indicado que está trabajando para minimizar el impacto y buscar soluciones a corto plazo.
Esta inesperada pausa en la actividad ha suscitado preocupación entre diversos sectores económicos de la región, que dependen de la producción de la planta murciana. Las autoridades locales y los representantes empresariales están siguiendo de cerca la situación para evaluar posibles repercusiones y coordinar esfuerzos que motiven una reactivación lo antes posible. Mientras tanto, los clientes han sido instados a mantenerse en contacto para recibir actualizaciones sobre el estado de las operaciones y cualquier medida paliativa que pueda ofrecerse.
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