El Ayuntamiento de Madrid ha puesto en marcha un ambicioso plan de renovación urbana para mejorar la accesibilidad en el casco histórico de Carabanchel Bajo, interviniendo en un total de ocho calles que han presentado problemas persistentes debido a aceras de ancho insuficiente. La iniciativa, que representa una inversión de 1,6 millones de euros, será ejecutada por el Área de Obras y Equipamientos, y se espera que los trabajos concluyan a finales de 2025.
El proyecto abarca una extensión de 15.230 metros cuadrados y se centrará en las calles Francisco Romero (entre Eugenia de Montijo y Blasón), Melisa (entre Eugenia de Montijo y Antonio Antoranz), Pajarera Real, Antonio Antoranz, Monseñor Óscar Romero (desde su inicio hasta Eugenia de Montijo), así como en la plaza de la Parroquia y las calles de la Sombra (entre Patilla y Padre Amigo) y Patilla.
En un esfuerzo por mejorar la accesibilidad peatonal, seis de estas calles pasarán a tener una plataforma única con adoquín de granito, asegurando la continuidad entre aceras y calzada y facilitando la creación de itinerarios peatonales accesibles. Por otro lado, en las calles Patilla y de la Sombra, aunque se mantendrán las aceras y calzadas a distinto nivel, se introducirán modificaciones para, precisamente, mejorar la accesibilidad para peatones y aumentar las plazas de aparcamiento disponibles.
Un cambio notable en la estructura vial será la reconfiguración del sentido del tráfico en la calle de la Patilla, que pasará de ser de doble sentido a un único sentido en dirección a la calle de la Sombra desde Eugenia de Montijo. Esta modificación permitirá la creación de una doble banda de aparcamiento en línea y afectará también al tramo de la calle de la Sombra que actualmente es de doble sentido.
El plan también contempla un aumento del 24% en las plazas de aparcamiento, alcanzando un total de 154, incluyendo cinco plazas reservadas para personas con movilidad reducida. Además, se adecuarán los imbornales y pozos existentes a la nueva alineación de bordillos y se trasladarán las farolas debido a cambios en la altura de la calzada. Otro cambio relevante será la sustitución del alumbrado público por tecnología LED en zonas de plataforma única, además de eliminar diez tramos aéreos de telecomunicaciones a través de canalizaciones soterradas.
Por último, el compromiso del Ayuntamiento con la sostenibilidad se verá reflejado en la preservación de los árboles ya existentes y la plantación de 55 nuevos árboles de alineación en alcorques que contarán con una red de riego, lo que contribuirá a mejorar el entorno urbano de Carabanchel Bajo.