Las instituciones educativas que han aprovechado las soluciones de software como servicio (SaaS) para potenciar su productividad están enfrentando una encrucijada tecnológica. Los recientes cambios implementados por gigantes del sector, como Google y Microsoft, están obligando a las escuelas a reevaluar sus necesidades a largo plazo. El fin del almacenamiento ilimitado gratuito y la eliminación de ciertas licencias en estas plataformas ha introducido nuevos retos relacionados con los costos y la privacidad de los datos. En este panorama, opciones como Synology Office Suite emergen como alternativas viables, ofreciendo soluciones seguras y adaptables a las demandas presentes y futuras de las instituciones académicas.
A partir de enero de 2025, Microsoft aplicará cambios significativos en su suite Microsoft 365 Educación. Las modificaciones incluyen la eliminación del plan gratuito Office 365 A1 Plus y una drástica reducción en el almacenamiento grupal, limitándolo a 100 TB por inquilino. Además, algunas aplicaciones estarán disponibles únicamente en versiones web, dejando fuera del acceso directo las populares versiones de escritorio de herramientas como Word, Excel y PowerPoint. Estos ajustes no solo representan un desafío financiero, empujando a las instituciones hacia planes premium más caros, sino que también avivan las preocupaciones sobre la privacidad de los datos y el cumplimiento de regulaciones como la FERPA y el GDPR.
La seguridad y la privacidad han tomado un protagonismo renovado, especialmente cuando se considera el historial de ciberataques a las instituciones educativas, que impactan a casi el 80% de ellas cada año. La protección de datos sensibles como expedientes estudiantiles y financieros es crucial, y los cambios en las políticas de los proveedores de SaaS refuerzan la necesidad de soluciones más confiables y auditables.
Ante estas circunstancias, las soluciones de productividad local se presentan como una opción sostenible y segura para las escuelas. Estas soluciones ofrecen un mayor control sobre los datos, eliminando la dependencia de los términos de servicio de proveedores externos, así como previsibilidad en los costos, evitando incrementos inesperados. Además, su capacidad de escalabilidad y estabilidad garantiza que se adapten a las necesidades cambiantes sin riesgo de interrupciones.
Synology Office Suite es un excelente ejemplo de esta tendencia, proporcionando herramientas de colaboración con altos estándares de seguridad y funcionalidades robustas, como almacenamiento seguro y edición en tiempo real. Iván Gento, International Marketing Manager de Synology, subraya: «Los cambios recientes en las políticas de los grandes proveedores de SaaS nos están recordando la importancia de recuperar el control sobre los datos y la infraestructura tecnológica. Las soluciones locales no solo ofrecen una respuesta sostenible a los retos actuales, sino que también abren la puerta a un entorno educativo más seguro y eficiente».
En esta transición, el papel de los distribuidores e integradores tecnológicos es fundamental. Estos actores ayudan a las instituciones educativas mediante consultorías estratégicas, asegurando una implementación y soporte técnico eficientes, y ofreciendo capacitación para el uso óptimo de las nuevas plataformas. Además, proporcionan opciones de financiamiento adaptadas a los presupuestos del sector.
Aunque los cambios en las políticas de los proveedores SaaS presentan desafíos inmediatos, también ofrecen una oportunidad para adoptar soluciones tecnológicas más robustas. Migrar a sistemas locales no solo protege la privacidad y asegura el cumplimiento de normativas, sino que también fortalece la infraestructura digital de las instituciones, permitiéndoles responder mejor a las necesidades de educadores y estudiantes. Con el apoyo adecuado, las escuelas pueden afrontar esta transformación con confianza, asegurando una modernización sostenida que garantice seguridad y eficiencia.