El Ayuntamiento de Madrid ha dado luz verde a un ambicioso proyecto de rehabilitación que transformará la plaza de Tirso de Molina y sus alrededores en el céntrico distrito de la capital. Tal como informó la vicealcaldesa y portavoz municipal, Inma Sanz, este proyecto implica una inversión significativa de 3 millones de euros y será gestionado por el Área de Obras y Equipamientos del consistorio.
El plan propone una restauración integral de la plaza de Tirso de Molina, acompañada de una remodelación de las calles aledañas, que incluyen Doctor Cortezo, Conde de Romanones, Colegiata y Concepción Jerónima. Uno de los objetivos centrales es suprimir las barreras arquitectónicas para garantizar la accesibilidad de todas las personas, al tiempo que se eliminan fondos de saco y espacios considerados inseguros. Asimismo, se buscará renovar el mobiliario urbano y las áreas de juego infantil, y se pondrá especial énfasis en mejorar el entorno ambiental con la incorporación de nuevos espacios verdes y jardinería.
En cuanto a la plaza en sí, se persigue transformarla en un ámbito público seguro y medioambientalmente adaptado, tanto para los residentes como para los visitantes. Esto incluirá una reorganización y selección precisa de pavimentos, jardines, iluminación y mobiliario urbano. Una de las piezas clave del proyecto será la completa renovación del alumbrado público, sustituyendo las actuales luminarias obsoletas por nuevas de máxima eficiencia energética. Además, se ampliarán las áreas ajardinadas y se renovará todo el sistema de riego. Para afrontar los problemas de filtraciones a la estación de metro subyacente, se mejorará todo el sistema de saneamiento y drenaje, y los adoquines de pavimento serán reemplazados por granito.
La intervención en las calles circundantes está diseñada para mejorar la movilidad y crear nuevas paradas de autobús que alivien la congestión en las plazas de Tirso de Molina y Jacinto Benavente. Igualmente, se buscará una mejor organización de los espacios para carga y descarga, aparcamiento para residentes, y la ubicación de servicios municipales como contenedores de reciclaje y estaciones de Bicimad. El deterioro actual de los pavimentos de aceras será abordado, ampliando su ancho para facilitar el tránsito peatonal y renovando las calzadas.
Dentro de la tendencia de las recientes remodelaciones urbanas de la ciudad, el proyecto prevé la plantación de nuevo arbolado. En total, se introducirán 46 árboles y más de 2.500 arbustos, en un esfuerzo por revitalizar esta emblemática área de Madrid. Los trabajos están programados para comenzar antes de fin de año y se espera que concluyan en la primavera de 2026. Con esta iniciativa, el Ayuntamiento busca no solo embellecer sino también hacer más funcional y accesible este espacio emblemático del corazón de Madrid.