En la jornada de hoy, los técnicos de Hacienda, agrupados bajo el sindicato Gestha, se congregaron en Madrid para manifestar su descontento con la paralización de su carrera profesional, una crisis de movilidad y una cuestionada gestión de Recursos Humanos por parte de la Agencia Tributaria (AEAT). Irene Rincón, consejera de Gestha, expresó su preocupación por las restricciones que afectan a los técnicos en su lucha contra el fraude fiscal. Según Rincón, estas limitaciones han provocado un descenso del 82% en las denuncias de delitos fiscales, alejando al Gobierno de sus objetivos en control tributario y gasto público.
Esta manifestación es la tercera de carácter estatal organizada por Gestha en lo que va del año y reunió a más de 1.200 técnicos. Los participantes expresaron su frustración por el incumplimiento de compromisos por parte de la Administración, ya que las promesas hechas antes del verano no se han materializado, a pesar de las movilizaciones de más de 3.000 técnicos en meses previos.
Rincón criticó la política de Recursos Humanos de la AEAT, señalando que el 85% de los funcionarios con competencias para investigar fraudes son técnicos cuyos esfuerzos se ven obstaculizados por una gestión ineficaz. Según la consejera, esto afecta negativamente al Ministerio de Hacienda y a la Agencia Tributaria.
Un punto de conflicto es la movilidad geográfica dentro del organismo, donde las plazas vacantes son asignadas prioritariamente a técnicos recién promovidos internamente, lo que genera disfunciones organizativas y un clima de descontento entre aquellos con mayor antigüedad. Gestha advierte que este problema debe resolverse antes de la transferencia de la gestión del Impuesto sobre la Renta a la Agencia Tributaria de Cataluña prevista en un acuerdo entre el PSC y ERC.
En la concentración, Gestha también solicitó al Secretario de Estado de Hacienda, Jesús Gascón, que intervenga para asegurar la transparencia en la distribución de fondos públicos, exigiendo que la Agencia Tributaria publique informes previamente retenidos sobre la ejecución presupuestaria y gratificaciones extraordinarias.
Finalmente, el sindicato más representativo del colectivo en la Agencia Tributaria, con más de 8.300 técnicos, advirtió sobre la posible intensificación de sus protestas si no se logran avances significativos en sus demandas. Gestha reitera su papel como la voz preponderante de los funcionarios de la Agencia Tributaria y reclama negociaciones específicas sobre sus condiciones laborales.
Fuente: Gestha
