Hace tres años, Alexéi Navalni retornó a Rusia tras recuperarse de un envenenamiento que casi le costó la vida, un acto que culminó con su detención en el aeropuerto y su posterior encarcelamiento. Desde entonces, se ha enfrentado repetidamente a la misma pregunta: "¿Por qué volviste?". En un entorno donde el cinismo político predomina, muchos suponen que retornó debido a un fallido trato oculto. Sin embargo, Navalni sostiene que su regreso no esconde ningún misterio: simplemente, no desea renunciar a su país ni traicionar sus convicciones. A lo largo de su vida, ha sostenido que las creencias verdaderas requieren sacrificios, una filosofía que ha guiado su enfrentamiento contra un sistema político corrupto y autoritario.
Navalni, reconocido activista anticorrupción y líder opositor, cuyo compromiso le costó la libertad y eventualmente la vida, es el autor de Patriota, una autobiografía donde narra su vida, desde su despertar político en la Unión Soviética hasta sus experiencias más recientes en prisión. En este libro, critica el régimen de Vladímir Putin, exponiendo la corrupción y las mentiras del gobierno que, según él, inevitablemente se desmoronará. A pesar de su encarcelamiento y su trágica muerte, Navalni sigue siendo un símbolo de resistencia; sus memorias sirven como un recordatorio de la importancia de los principios de libertad individual y la lucha incesante por una Rusia libre y justa.
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