El regreso a la rutina tras las vacaciones de verano presenta un reto particular para muchos: retomar buenos hábitos alimenticios. Durante el periodo estival, es común que las personas descuiden su dieta, lo que puede ocasionar efectos negativos como una disminución en la concentración y el rendimiento diario. Un estudio reciente revela que alrededor del 40% de los trabajadores reconocen haber abandonado sus prácticas alimenticias saludables durante este tiempo.
Para facilitar la transición de vuelta a la rutina, la cadena madrileña Viena Capellanes, con una trayectoria que se remonta a 1873, ha puesto en marcha una nueva línea de packs semanales de platos caseros de quinta gama. Estos menús, diseñados para proporcionar un primer y segundo plato diario, aportan un total de 650 kcal por comida y cumplen con las recomendaciones de los expertos en nutrición.
Elaborados artesanalmente en su obrador central, los platos se presentan en barquetas individuales, listas para ser consumidas tras un breve calentamiento. El innovador envasado en atmósfera protectora asegura la conservación del sabor y las propiedades nutricionales de los alimentos sin necesidad de utilizar conservantes.
Viena Capellanes también ha diversificado su oferta para adaptarse a diversas necesidades dietéticas, incluyendo opciones sin gluten, vegetarianas y veganas. Esto permite a los consumidores personalizar sus elecciones de acuerdo a sus preferencias alimenticias.
Para mejorar la nutrición en el entorno laboral, los expertos recomiendan mantener horarios regulares de comida, equilibrar los macronutrientes, evitar picos de azúcar y asegurarse una adecuada hidratación. Planificar los menús con antelación también ayuda a evitar opciones poco saludables ante la falta de tiempo.
Con iniciativas como la de Viena Capellanes, el regreso a la oficina puede ser más llevadero, permitiendo que los trabajadores mantengan una alimentación equilibrada sin sacrificar tiempo y esfuerzo en la cocina.