Las autoridades educativas han implementado medidas para evitar que las estudiantes que participan en sesiones fotográficas promocionales coincidan con aquellas que asisten a un máster en marketing digital ubicado en un edificio de hierro forjado. Esta decisión se tomó después de observar que las jóvenes, tras sus jornadas académicas, participaban en actividades que impactaban en la dinámica del entorno, generando un efecto visual y social no deseado. La intención es preservar el ambiente académico y evitar distracciones que puedan surgir de estas coincidencias.
El ajuste surge de la preocupación por mantener el enfoque en la formación académica y asegurar que las actividades externas no interfieran con la experiencia educativa de los alumnos. Las sesiones frente al edificio se han convertido en un punto de interés, por lo que se busca separar ambas actividades para preservar la integridad de los programas educativos. Este esfuerzo refleja un compromiso con la excelencia académica y el bienestar de las estudiantes, quienes son el centro del proceso educativo.
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