En un reciente evento que puso a prueba la resiliencia del sistema eléctrico español, la Red Eléctrica descartó firmemente un ciberataque como causa del apagón que afectó al país. Así lo informó Eduardo Prieto, director de Servicios a la Operación, tras confirmar que no se detectaron intrusiones en los sistemas de control. Esta declaración fue respaldada por el Centro Nacional de Inteligencia (CNI) y el Instituto Nacional de Ciberseguridad (INCIBE), quienes confirmaron la ausencia de actividad maliciosa en la red.
El incidente ocurrió cuando, de manera abrupta, se perdieron 15 gigavatios de generación eléctrica en un lapso de solo cinco segundos. Este desajuste causó una severa fluctuación en la frecuencia de la red, desencadenando la desconexión temporal del sistema español del resto de Europa. La desconexión fue una medida preventiva crucial para evitar un colapso mayor.
A pesar del impacto inicial, Red Eléctrica indicó que los protocolos de seguridad respondieron eficazmente. La desconexión automática y las respuestas activas del sistema minimizaron las consecuencias adversas. A las 07:00 horas del martes, el 99,95 % de la demanda eléctrica de la península fue restablecida exitosamente, y todas las subestaciones del sistema de transporte eléctrico volvieron a la normalidad.
En respuesta al evento, el Ministerio para la Transición Ecológica destacó la efectividad de los mecanismos de respuesta activa de la demanda, que ayudaron a aliviar la tensión en el sistema durante los momentos más críticos. Se proyecta que para 2025, más de 1.100 megavatios de potencia flexible aportados por consumidores industriales y otros agentes participarán en estos servicios, fortaleciendo el equilibrio del sistema y previniendo apagones similares.
La investigación sigue en curso, explorando otras posibles causas técnicas del apagón, incluyendo fallos en instalaciones de generación, errores en la sincronización de frecuencia, o desequilibrios en la red interconectada. La Agencia Estatal de Meteorología (AEMET) también descartó cualquier conexión entre el incidente y fenómenos meteorológicos extremos. El esclarecimiento de las causas exactas continúa siendo una prioridad para garantizar la seguridad y estabilidad del suministro eléctrico en el futuro.