El Ejército israelí ha intensificado sus ataques en la Franja de Gaza, causando la muerte de al menos 51 personas durante la noche y la madrugada del jueves, según fuentes locales. Este incremento en la violencia se produce apenas días antes del esperado alto el fuego entre Hamás e Israel, que entrará en vigor el domingo, tal como fue anunciado desde Catar. Los bombardeos más severos ocurrieron en áreas densamente pobladas, incluyendo el campamento de Nuseirat, la región sureña de Jan Yunis, y especialmente la Ciudad de Gaza, que sufrió 28 víctimas mortales. Según informan medios locales, además de los fallecidos, hubo numerosos heridos por ataques en zonas residenciales como Sheij Radwan, Al Daraj, y Al Rimal, donde equipos de rescate recuperaron cuerpos entre los escombros.
El acuerdo de alto el fuego, anunciado por Mohamed bin Abderrahmán Al Thani, primer ministro de Catar, busca poner fin a un conflicto que en 15 meses ha resultado en la muerte de más de 46.700 palestinos, y al menos el doble de heridos, pese a que se considera que estos números podrían ser conservadores. La tregua contempla una primera fase de seis semanas, durante las cuales 33 rehenes israelíes, entre los que se priorizará la liberación de niños, mujeres y ancianos, serán intercambiados por más de 1.200 prisioneros palestinos. Hamás, grupo islamista que gobierna Gaza, ha recibido el acuerdo con optimismo, viéndolo como un avance hacia sus objetivos de «liberación y retorno» del pueblo palestino. Este pacto sigue a un intento anterior de tregua a finales de noviembre de 2023, cuando se logró la liberación de 105 rehenes a cambio de 240 prisioneros, poniendo preferencia en mujeres y niños.
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