La capital española se ha convertido en el epicentro del diálogo sobre los servicios de emergencias prehospitalarias con la inauguración del III Foro de los Servicios de Emergencias Prehospitalarias de España. La vicealcaldesa de Madrid y delegada de Seguridad y Emergencias, Inma Sanz, fue la encargada de dar inicio a este evento, rindiendo homenaje a las víctimas de la Depresión Aislada en Niveles Altos (DANA) y extendiendo un mensaje de solidaridad hacia los equipos de emergencia de la Comunidad Valenciana. Este gesto de reconocimiento también se extendió a las unidades de emergencia de otras regiones que han colaborado en las zonas afectadas, demostrando la interconexión y el apoyo mutuo entre las comunidades.
Sanz subrayó la importancia que reviste esta tercera edición del foro en un contexto de fenómenos climáticos adversos. «Estos servicios son importantísimos en el día a día, pero cuando llega una catástrofe pasan a ser absolutamente vitales», afirmó. Su intervención puso de relieve el objetivo central de este foro: aprender y mejorar colectivamente.
La vicealcaldesa también destacó los esfuerzos del Ayuntamiento de Madrid en el fortalecimiento de los servicios de emergencia, haciendo énfasis en la mejora de la formación, infraestructuras y la adopción de nuevas tecnologías en SAMUR-Protección Civil. Este servicio municipal es altamente valorado por los ciudadanos, reafirmando su papel esencial en situaciones de urgencia.
Durante el foro, se abordarán temas de crucial importancia como el uso de la inteligencia artificial para optimizar respuestas, la gestión eficiente de las centrales de coordinación y los estándares de calidad. Además, se discutirá acerca de la recién introducida especialidad de Medicina de Urgencias y su impacto en los servicios de emergencia, subrayando la evolución constante del sector en respuesta a nuevas necesidades.
Este encuentro representa una plataforma fundamental para el intercambio de conocimientos y experiencias entre profesionales, con el propósito de continuar mejorando la capacidad de respuesta ante situaciones de emergencia y reafirmar el compromiso de proteger y salvar vidas. En un mundo cada vez más desafiante, el fortalecimiento de estos servicios no solo es necesario, sino esencial.