Raspberry Pi, la reconocida empresa británica de fabricación de computadoras económicas, ha revelado su intención de cotizar en la Bolsa de Valores de Londres. Este movimiento estratégico busca alcanzar una valoración imponente de 630 millones de dólares y marca un hito significativo tanto para la empresa como para el mercado de valores del Reino Unido.
Fundada en 2008 como una subsidiaria de la Fundación Raspberry Pi, la empresa se ha mantenido fiel a su misión inicial: fomentar el interés en la informática entre los jóvenes. Desde sus inicios, Raspberry Pi ha trabajado para que la informática sea accesible a todos, ofreciendo computadoras asequibles y de fácil uso, lo cual ha resonado en comunidades educativas y de entusiastas tecnológicos por igual.
La decisión de cotizar en Londres resulta particularmente relevante para el mercado de valores del Reino Unido, que ha enfrentado dificultades para atraer a empresas tecnológicas de alto perfil. La entrada de Raspberry Pi en la bolsa no solo contribuirá a elevar el perfil del mercado británico, sino que también podría incentivar a otras compañías tecnológicas a considerar la Bolsa de Londres como una opción viable para su expansión financiera.
Desde su base en Cambridge, Raspberry Pi está ultimando los detalles de su cotización en la Bolsa de Londres, aspirando a una valoración de 630 millones de dólares. Esta cifra sigue a una inversión privada que valoró a la empresa en 560 millones de dólares el año pasado. Desde su lanzamiento en 2012, la empresa ha vendido más de 60 millones de computadoras de placa única y módulos de computadoras. Los ingresos en 2023 aumentaron un 41%, alcanzando los 265,8 millones de dólares, mientras que las ganancias antes de impuestos casi se duplicaron, sumando 38,2 millones. Para 2024, se espera que las ventas superen los 8,4 millones de unidades, un incremento respecto a los 7,4 millones vendidos el año anterior.
A lo largo de su trayectoria, Raspberry Pi ha permanecido centrada en su objetivo principal de democratizar la informática. Eben Upton, CEO de la compañía, ha señalado que, aunque inicialmente se buscaba proporcionar computadoras asequibles para jóvenes, hoy en día reconocen el potencial de su tecnología en una variedad de contextos.
Raspberry Pi es una placa de microordenador extremadamente versátil, utilizada en una amplia gama de aplicaciones que van desde el aprendizaje de programación hasta centros multimedia, servidores caseros, domótica e IoT, juegos retro y el desarrollo de prototipos electrónicos. Además, es una herramienta valiosa en la educación, siendo recurrentemente empleada en proyectos escolares. Otras aplicaciones incluyen estaciones meteorológicas, sistemas de seguridad y computadoras de escritorio básicas, así como VPN personal y proyectos DIY.
Una característica que distingue a Raspberry Pi es su vibrante y activa comunidad de usuarios y desarrolladores. Esta red global de entusiastas continúa inventando nuevas funcionalidades y emocionantes proyectos, lo que ha sido vital para la evolución y el éxito sostenido de la plataforma.
En cuanto a los costos, las computadoras Raspberry Pi son notablemente accesibles, con precios que varían entre los 35 y 80 euros según el modelo y sus especificaciones.
La próxima cotización de Raspberry Pi en la Bolsa de Valores de Londres no solo es un reflejo de su éxito comercial, sino que también subraya su compromiso continuado con la innovación tecnológica y la democratización de la informática. Este movimiento audaz no solo beneficiará a la compañía, sino que también podría tener un impacto positivo en el mercado de valores del Reino Unido, atrayendo a más empresas tecnológicas y fomentando el crecimiento y desarrollo en el sector.