Durante una tensa sesión de la comisión de investigación del Senado, el Partido Popular (PP) ha solicitado la identificación de Patricia Úriz, expareja de Koldo García, en medio de un controvertido interrogatorio. Este evento, impulsado por las quejas de senadores de Vox, UPN y PP sobre el hecho de que Úriz estuviera parcialmente cubierta durante su comparecencia, culminó con la petición del PP para que Úriz mostrara su documentación, pese a haberla enseñado ya a los policías de la Cámara alta. El presidente de la comisión, Eloy Suárez, también del PP, accedió a que Úriz mostrara su documento en un espacio privado para preservar su derecho a la imagen. La situación subió de tono cuando la senadora Ana Beltrán insistió en que Úriz se descubriera el rostro, acusándola de querer ocultarse «por vergüenza» tras haber cometido supuestos actos ilícitos durante la pandemia junto a García.
Por su parte, el senador del PSOE, Alfonso Gil, aprovechó la ocasión para destacar lo que considera una hipocresía dentro de las dinámicas políticas, recordando que ese mismo día Alberto Amador, pareja de Isabel Díaz Ayuso, comparecía en los juzgados sin que se le pudiera investigar a fondo debido al bloqueo del PP en la Comunidad de Madrid. Mientras el PP defiende su actuación como una mera diligencia hacia la transparencia, la intervención de Beltrán, quien en su momento respaldó a Pablo Casado durante sus enfrentamientos internos en el PP, reavivó debates políticos pasados y subrayó las tensiones entre instituciones y partidos. En tanto, fuentes populares descartan que la elección de Beltrán para interrogar a Úriz fuera deliberada, señalando en cambio su conocimiento previo del caso debido a su experiencia como portavoz en el Parlamento de Navarra.
Leer noticia completa en El Pais.