Los sindicatos CCOO, UGT, USO y Sindicat Autònom del Transport de les Illes (SATI) llevaron a cabo una manifestación en Palma, congregando a 150 trabajadores frente a la sede de la Federación Empresarial Balear del Transporte (FEBT). Esta acción se enmarca dentro de las protestas a nivel estatal convocadas para reclamar la jubilación anticipada. Según los sindicatos como CCOO, el seguimiento de la huelga fue del 100%, pese a calificar de «abusivos» los servicios mínimos impuestos, mientras que la FEBT reportó una participación del 10%. Voces sindicales como Manuel Vega, de UGT, destacaron la necesidad de permitir la jubilación a los 60 años, introduciendo coeficientes reductores por la peligrosidad y penosidad laboral, y facilitar contratos de relevo.
Por otra parte, la huelga en la isla de Ibiza se vio afectada por un endurecimiento de los servicios mínimos, lo que generó críticas de Chema Martínez de CCOO, quien calificó la situación como una restricción del derecho a huelga. No se descarta la posibilidad de adoptar medidas más drásticas en futuras convocatorias para negociar servicios mínimos. Asimismo, desde la FEBT, Petra Mut describió la participación como «muy suave» en turno de mañana, aunque mantienen un cierto optimismo de cara a negociar un acuerdo, inspirados en precedentes en el sector del transporte de mercancías. Sin embargo, mantienen reticencias a solicitar que la administración considere la jubilación anticipada para estos trabajadores.
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