La integración del mercado de capitales en la Unión Europea sigue siendo un desafío pendiente, a pesar del interés del Banco Central Europeo y las metas fijadas por la propia Unión. La tarea de alinear las políticas de los 27 estados miembros se presenta compleja, situación que impulsa al ministro de Economía, Carlos Cuerpo, a proponer un enfoque diferenciador. En su propuesta, que se presentará este lunes ante el Eurogrupo en Luxemburgo, Cuerpo sugiere que cuando al menos tres estados miembros logren consenso sobre temas de integración de mercado, puedan avanzar sin esperar la unanimidad. Esta iniciativa busca facilitar acuerdos en áreas como la titulización de activos financieros y la armonización fiscal, componentes esenciales para reforzar la competitividad del bloque frente a gigantes como Estados Unidos y China.
Acorde a lo planteado en el informe del ex primer ministro italiano Mario Draghi, la urgencia de eliminar barreras normativas nacionales es crítica para evitar que empresas europeas deban buscar financiamiento fuera del continente y asegurar que los ahorros permanezcan dentro de Europa. La propuesta de Cuerpo también incluye la creación de un «laboratorio de competitividad» para testar nuevas ideas y un sistema de calificación crediticia armonizado para pequeñas y medianas empresas. Sin embargo, la posibilidad de establecer un organismo de supervisión bancaria enfrenta oposición de estados más pequeños que prefieren mantener esta competencia a nivel nacional. El ministro subraya la importancia de acelerar este proceso para revertir el rezago en materia de competitividad señalada por Draghi y potenciar así el crecimiento económico europeo.
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