La delegada de Obras y Equipamientos, Paloma García Romero, junto al concejal de Centro, Carlos Segura, han realizado una inspección en el túnel bajo la emblemática plaza Mayor, donde actualmente se están llevando a cabo importantes trabajos de refuerzo estructural. Este túnel, que une las calles de Toledo y Atocha con San Felipe Neri en un tramo cercano a los 600 metros, está siendo sometido a una intervención crucial para asegurar la seguridad de sus usuarios.
Esta obra, iniciada el pasado mes de junio, cuenta con un presupuesto de 800.000 euros y tiene previsto concluir el 1 de septiembre. Las inspecciones realizadas detectaron un notable deterioro en el forjado del túnel, originado por filtraciones de agua desde la plaza que afectaron a las vigas y placas alveolares, generando fisuras, oquedades y corrosión.
El plan de rehabilitación incluye acciones tanto dentro del túnel como en la superficie de la plaza Mayor. En una sección de aproximadamente 400 metros cuadrados del sector suroeste de la plaza, se procederá a retirar los adoquines, demoler la losa existente y reemplazar las dañadas placas alveolares. Posteriormente, se construirá una nueva losa de compresión, se aplicará una membrana impermeabilizante y se reinstalarán los adoquines originales.
Dentro del túnel, el proyecto contempla la instalación de una cimbra temporal, tratamiento de vigas metálicas, reparación del forjado no sustituido y renovación del pavimento con asfalto nuevo, con especial atención a las rampas.
Actualmente, el túnel está cerrado completamente al tráfico, aunque siguen operativos los accesos a los aparcamientos subterráneos, permitiendo la entrada desde la calle de Atocha y salida por la calle de Felipe III. Mientras tanto, los trabajos en la superficie de la plaza Mayor ya han comenzado. Para los conductores, la circulación se ha desviado por las calles de Segovia y Sacramento como alternativa al cierre del túnel.