Laurion y Prosol han sellado un acuerdo estratégico que podría resultar en la venta de EiDF, siempre que un tercer actor presente una oferta vinculante de al menos 400 millones de euros. Según informes enviados a la CNMV, la actualización del pacto permite a Laurion forzar a Prosol a vender sus acciones si se acepta una oferta, dando lugar a un derecho de arrastre. Este movimiento llega tras la entrada de Laurion para reorganizar la deuda y activos de EiDF, un proceso que, según la empresa, ha dejado a EiDF en «perfecto funcionamiento». Fernando Romero, fundador y uno de los principales accionistas de EiDF, ha mostrado una apertura creciente hacia una eventual desvinculación de la compañía que estableció, permitiendo que Laurion negocie este tipo de acuerdos que finalmente podrían facilitar su salida.
El acuerdo añade que Laurion, ahora bajo la dirección de Jordi Berini, está preparado para avanzar en una nueva fase, centrada en la colocación de EiDF en el mercado. Durante esta fase, Laurion ha pactado diversas estrategias de salida con los accionistas mayoritarios. El acuerdo también confiere a Laurion una opción de compra irrevocable sobre las acciones de Prosol, asegurando que estas puedan ser adquiridas a un precio igual al de cualquier oferta vinculante que supere el umbral acordado. Aunque no implica que la compañía esté automáticamente a la venta por ese precio, este acuerdo fija un mínimo consensuado con Romero para su eventual salida del negocio. Este movimiento forma parte del intento de Laurion por sanear y preparar la empresa para futuras transacciones potenciales en el competitivo sector energético.
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