En el contexto de la controversia por la condena de Pietro y Rocco Costanzia a doce y ocho años de prisión por intento de homicidio, su padre, Carlo Costanzia, ha defendido su posición en un programa de Telecinco. Durante el juicio, se produjo un altercado con una reportera que lo acusó de agresividad al intentar obtener una declaración sobre el caso. Carlo, quien grabó el incidente, argumenta que sus acciones fueron malinterpretadas y que la presencia de la periodista en una audiencia privada estaba prohibida, lo que justifica su descontento.
Costanzia también mencionó las implicaciones legales que podría enfrentar la reportera por vulnerar el derecho a la intimidad, aunque anunció que no la denunciaría por tener preocupaciones más relevantes. En una acalorada discusión con la colaboradora del programa, Carlo insistió en que no se comportó de manera violenta y que la acusación de la periodista es una falta de profesionalismo. Su defensa se centra en el derecho a la intimidad y la protección de los involucrados en el juicio, mientras se desata un debate sobre la ética periodística en la cobertura de casos sensibles.
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