Cientos de turistas británicos han expresado su descontento por las condiciones de hacinamiento que enfrentan en el aeropuerto de Tenerife Sur, donde los medios del Reino Unido han calificado el trato recibido como «inhumano» y «tercermundista». La situación se tornó especialmente caótica el lunes, cuando cerca de 500 viajeros llegaron en rápida sucesión y solo había dos cabinas de pasaportes operativas con cuatro agentes para atender el flujo masivo de pasajeros. Esto resultó en largas colas de más de dos horas, donde muchos se sintieron atrapados en un ambiente claustrofóbico.
Las quejas no se limitan a la espera; también surgieron preocupaciones de seguridad, ya que varios padres tuvieron que levantar a sus hijos para evitar que sufrieran problemas de asfixia en la aglomeración. Ante este escenario, la presidenta del Cabildo de Tenerife, Rosa Dávila, convocó una reunión de emergencia tras considerar la situación «inaceptable». Atribuyó el problema a la falta de personal en los controles fronterizos, una situación que se ha agravado desde que el Reino Unido salió de la Unión Europea y que se vio acentuada por fallos en los sistemas automatizados de procesamiento de pasaportes para niños.
Leer noticia completa en 20minutos.