En 1958, la firma española Santana logró un acuerdo con Land Rover para producir el famoso todoterreno británico en su planta de Linares, Jaén. El Land Rover Santana se hizo rápidamente un nombre por su resistencia y versatilidad, convirtiéndose en un ícono del automovilismo español. Sin embargo, la fabricación cesó en 1994 tras la finalización del acuerdo con la marca británica, aunque los vehículos pueden aún encontrarse en el mercado de ocasión, con muchos de ellos optando por la calificación de vehículos históricos.
Los precios de los Land Rover Santana de segunda mano oscilan entre 8,000 y 10,000 euros, aunque modelos recién restaurados pueden alcanzar cifras superiores a 20,000 euros. Para que un Santana sea considerado vehículo histórico, debe tener al menos 30 años y conservar sus características originales, tal como indica el nuevo reglamento que entró en vigor en octubre de 2024. Santana continuó produciendo vehículos bajo la marca Suzuki tras la salida de Land Rover en los años 90, hasta que la planta cerró en 2011 debido a importantes pérdidas económicas.
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