El PP y Vox se preparan para presentar este martes en el Congreso sus enmiendas de totalidad contra la reforma del Reglamento del Congreso impulsada por el PSOE y sus aliados. Esta reforma, motivada por incidentes protagonizados por algunos «pseudoperiodistas», busca establecer sanciones para aquellos informadores que obstaculicen el trabajo parlamentario. Según los promotores de la iniciativa, que incluye a partidos como Sumar y ERC, el objetivo es responder a las demandas de colectivos profesionales de periodistas, no restringir su labor, sino regular el comportamiento de aquellos que actúan como activistas en eventos informativos.
La reforma incluye cambios significativos en el proceso de acreditación y renovación de credenciales de prensa, estableciendo un régimen sancionador y promoviendo un Consejo Consultivo de Comunicación Parlamentaria. Esta nueva normativa obligará a los periodistas a respetar las «reglas de cortesía parlamentaria» y a coordinar encuentros informativos a través de sus respectivos grupos. Aunque el PP sostiene que la presidencia del Congreso ya cuenta con poderes suficientes para mantener el orden público, todo indica que la mayoría del Congreso se inclinará a favor de la reforma del PSOE, lo que podría facilitar su aprobación y puesta en vigor al inicio del próximo periodo de sesiones.
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