Félix Rodríguez de la Fuente, notable naturalista español, nació y falleció el 14 de marzo, una fecha que coincide con la floración de los almendros en su pueblo natal, Poza de la Sal, en la provincia de Burgos. Este fenómeno natural simboliza la importancia de conservar la flora y fauna, un legado que Rodríguez de la Fuente promovió incansablemente durante su vida. En su honor, Poza de la Sal organiza en marzo diversas actividades relacionadas con la naturaleza, que van desde rutas con lobos y senderos entre almendros en flor, hasta jornadas de plantación y talleres para aprender a utilizar recursos naturales en casos de emergencia. Todo esto busca mantener vivo el espíritu de conservación que el naturalista defendió.
Poza de la Sal, recientemente incluida en la lista de Los Pueblos Más Bonitos de España, destaca no solo por su patrimonio natural, sino también por su rica historia y arquitectura medieval. El municipio ofrece a sus visitantes un entorno excepcional para disfrutar del paisaje, con vistas impresionantes de los Montes Obarenes y la Sierra de la Demanda. Además, el Espacio Medioambiental Félix Rodríguez de la Fuente ofrece una mirada educativa a través de la que se puede apreciar el valor de la conservación ambiental. Entre las atracciones más destacadas está «El Salero», un diapiro salino que revela la importancia histórica y económica de la producción de sal en la región, añadiendo un toque único a la experiencia cultural y natural de este encantador lugar.
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