En un entorno tecnológico donde la innovación es moneda corriente, las organizaciones buscan constantemente optimizar su adopción de la nube y acelerar procesos para no quedarse atrás. Sin embargo, esta transformación suele ser un camino lleno de desafíos, especialmente cuando equipos como el Centro de Excelencia en la Nube (CCoE, por sus siglas en inglés) son percibidos como barreras debido a restricciones de recursos y una demanda insostenible de apoyo.
Frente a este panorama, Hearst, un gigante mundial en medios e información, decidió romper con el paradigma y desarrollar una innovadora solución: un asistente conversacional de inteligencia artificial generativa, específicamente diseñado para ofrecer orientación a sus unidades de negocio a través del CCoE. Con el empleo de Amazon Q Business, Hearst escaló sus mejores prácticas en la nube, facilitando un acceso automático a una base centralizada de documentos e información para sus empleados.
La implementación principal consistía en establecer una gobernanza en la nube de autoservicio a gran escala. El conglomerado llevó a cabo una exhaustiva transformación de su infraestructura en Amazon Web Services (AWS), que había sufrido con el modelo tradicional del CCoE debido, entre otros aspectos, a la extrema demanda que desbordaba al equipo, la limitada escalabilidad y la falta de consistencia en la gobernanza sin un mecanismo estandarizado.
Para mitigar estos problemas, Hearst utilizó las capacidades de Amazon Q Business en la construcción de un asistente conversacional. Este asistente, creado con servicios de AWS como AWS IAM Identity Center y Amazon S3, otorga a las unidades de negocio el acceso a prácticas de gobernanza actualizadas, asegurando que los empleados accedan únicamente a documentos aprobados.
La respuesta fue contundente: en el primer mes, Hearst logró reducir un 70% las solicitudes de soporte al CCoE, permitiendo al equipo concentrarse en tareas de mayor impacto estratégico. Un mes después, las solicitudes se redujeron en un 76%. Este enfoque no solo alivió la carga de trabajo del equipo, sino que también elevó la calidad y consistencia de las prácticas de gobernanza en la nube.
Con esta solución de inteligencia artificial generativa, Hearst ha posicionado a su CCoE como un habilitador clave de la transformación en la nube, estableciendo un precedente que puede servir como guía para otras empresas que busquen optimizar la gobernanza de su infraestructura en la nube.