El gobierno colombiano, liderado por el presidente Gustavo Petro, ha decidido suspender la extradición a Estados Unidos de Gabriel Yepes Mejía, alias HH, comandante de los Comuneros del Sur, una disidencia del ELN en Nariño. Yepes se encuentra en medio de negociaciones con el gobierno nacional como parte de la política de «paz total», que busca acuerdos con grupos armados. Los Comuneros han mostrado avances significativos al entregar armas y firmar acuerdos para sustituir cultivos ilícitos. La resolución, avalada por Petro y el ministro de Justicia encargado, Augusto Ocampo, establece que la extradición será reconsiderada si Yepes deja de contribuir al proceso de paz.
La decisión de suspender la extradición de Yepes no es un caso aislado en los desafíos de Colombia respecto a la «paz total» y sus implicaciones con Estados Unidos. Anteriormente, la Fiscalía colombiana detuvo a Giovanni Andrés Rojas, alias Araña, líder de los Comandos de la Frontera, también solicitado por extradición. Este incidente resaltó la falta de garantías jurídicas en el país y la tensión con la administración de Donald Trump, lo que podría desembocar en repercusiones económicas. A pesar del riesgo de conflicto diplomático, Petro insiste en que las extradiciones pueden detenerse si los procesos de paz logran avances significativos.
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