El presidente Gustavo Petro ha logrado movilizar a una parte significativa de la opinión colombiana para apoyar una consulta popular que busca rescatar su reforma laboral, propuesta clave de su agenda política. El rechazo del Senado a mediados de marzo impulsó al mandatario a proponer que los colombianos expresen su apoyo directamente en las urnas. Según una encuesta de Cifras y Conceptos, hecha entre el 24 de abril y el 3 de mayo, el 57% de los encuestados apoya la consulta. Ante este creciente respaldo, los senadores deberán debatir la aprobación de la propuesta, ahora bajo la presión no solo del presidente, sino también del público que exige su voz en este debate.
La encuesta revela que, pese a tener una imagen desfavorable en el panorama general, Petro ha logrado captar el apoyo para esta iniciativa específica, con el 57% de los encuestados expresando su deseo de que la consulta avance. En particular, la idea de formalizar a los trabajadores informales y mejorar la seguridad social ha sido bien recibida, con un 94% de apoyo. Sin embargo, el presidente del Senado, Efraín Cepeda, ha criticado la presión ejercida por Petro, calificándola de confrontacional. Esta dinámica contrasta con la resistencia que ha enfrentado otra de sus propuestas, la reforma a la salud, que no ha logrado el mismo apoyo popular.
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