El Congreso de Perú ha decidido declarar persona non grata a Claudia Sheinbaum, presidenta de México, intensificando así un conflicto diplomático entre ambas naciones. La medida fue votada con 63 a favor y 34 en contra, tras el asilo otorgado por México a Betssy Chávez, ex primera ministra de Pedro Castillo, acusada de conspiración en Perú. Mientras Perú asegura que el asilo representa una injerencia en sus asuntos internos, México argumenta que su acción está en línea con el derecho internacional y no busca desestabilizar la relación bilateral. La historiada relación conflictiva entre estos países se refleja también en previas descalificaciones a otros líderes como Gustavo Petro y Andrés Manuel López Obrador.
Durante el acalorado debate parlamentario en Lima, voces como la del congresista Ernesto Bustamante apuntaron acusaciones a Sheinbaum de vínculos con el narcotráfico y criticaron la postura mexicana hacia Perú desde la administración de López Obrador. La crítica también se extendió al uso de recursos estatales para mitines políticos en el contexto interno peruano, como el de la candidatura de Keiko Fujimori. La reacción oficial del Congreso peruano en redes sociales enfatiza el lema «¡El Perú se respeta!», mientras el presidente de transición, José Jerí, mantiene una postura ambigua respecto al otorgamiento del salvoconducto para Chávez, indicando que se revisará legalmente antes de proceder.
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