La reciente edición de RightsCon 2025, celebrada entre el 24 y el 27 de febrero en Taipéi, Taiwán, reunió a destacados expertos en derechos humanos, tecnólogos, activistas y representantes gubernamentales, todos comprometidos en un desafío común: abordar las complejidades contemporáneas de los derechos digitales. La Electronic Frontier Foundation (EFF), firme en su propósito, volvió a resaltar la urgente necesidad de formar alianzas en defensa de los derechos digitales, especialmente frente al crecimiento de gobiernos autoritarios y el uso cada vez más problemático de tecnologías por parte de grandes corporaciones que, sin una adecuada regulación, podrían facilitar abusos.
Uno de los aspectos más críticos debatidos en la conferencia fue la crisis financiera que enfrentan las organizaciones de derechos digitales, ahondada por significativos recortes de fondos provenientes de Estados Unidos. Se estima que estas reducciones han resultado en una contracción del 30% en la comunidad global dedicada a esta causa, con el sur global experimentando el mayor impacto. Sumado a esto, la imposición de aranceles por parte del anterior gobierno estadounidense a compañías tecnológicas ha complicado todavía más las dinámicas de responsabilización de estas plataformas.
La solidaridad internacional también fue un pilar de la conferencia, manifestándose con fuerza ante casos emblemáticos como el de Alaa Abd El-Fattah, un activista egipcio detenido de manera ilegal. Su madre, Laila Soueif, participó a través de un emotivo mensaje de video durante la apertura del evento, apelando a la audiencia a no dejar que la lucha de su hijo y el sufrimiento que afronta sean en vano, poniendo sobre la mesa la urgente necesidad de libertad de expresión y apoyo a defensores de derechos humanos alrededor del mundo.
Otros temas de discusión giraron en torno al papel que juegan las plataformas en línea en el discurso cívico, alertando sobre su potencial para ser utilizadas en la manipulación política y la censura. Se exploró la importancia de establecer regulaciones efectivas, como la Ley de Servicios Digitales de la Unión Europea, para asegurar que estas plataformas operen con responsabilidad y supervisión adecuada.
La protección de individuos bajo regímenes opresivos mediante herramientas de cifrado también fue un área crítica de interés. Los asistentes reconocieron la necesidad de aumentar la diversidad y el uso de estas herramientas como un medio para evadir censura y permitir el libre flujo de información.
El encuentro no dejó de lado la grave situación de los derechos humanos en Gaza, donde la campaña #ReconnectGaza fue lanzada con el objetivo de restaurar el derecho a la comunicación frente a la devastación de las infraestructuras de telecomunicaciones. Preocupación generó la relación de Microsoft con las fuerzas israelíes, cuestionando su verdadero compromiso con los derechos humanos.
El cierre de RightsCon 2025 reafirmó, a pesar de los desafíos, el valor de la solidaridad y la colaboración como bases esenciales para construir un futuro más justo y libre, avanzado con la fortaleza de la comunidad global que defiende los derechos digitales.
