El ex presidente de la Generalitat ha emitido una contundente advertencia referente a la financiación singular de Cataluña, subrayando que el incumplimiento de este compromiso podría tener graves consecuencias para los Gobiernos actuales de España y Cataluña, liderados por Pedro Sánchez y Salvador Illa, respectivamente. En su declaración, el ex mandatario expresó su preocupación por la falta de progresos en la implementación de un modelo financiero que satisficiera las particularidades económicas y fiscales de la región catalana, algo que había sido acordado anteriormente. Este incumplimiento, según sus palabras, podría desencadenar una crisis política y económica en ambas administraciones.
El pasado domingo, en una reunión con medios locales, el ex líder autonomista enfatizó que la falta de una financiación adecuada no solo socavaría la confianza de los catalanes en las instituciones españolas, sino que también pondría en riesgo proyectos vitales para el desarrollo regional. Asimismo, indicó que la presión social podría incrementarse, llevando a manifestaciones de descontento y posibles tensiones territoriales. La advertencia llega en un momento crítico para la estabilidad política en España, y presiona a los gobiernos de Sánchez e Illa a acelerar la negociación y aplicación de un modelo financiero que asegure la cooperación y el bienestar de todas las partes involucradas.
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