Los colores en el hogar están viviendo una transformación significativa, moviéndose hacia paletas naturales, suaves y emocionales. Un análisis reciente realizado por PINTORES MADRID CALIDAD revela que las tonalidades actuales no solo definen el estilo, sino que también buscan equilibrio y funcionalidad en los espacios habitados.
La selección de colores se ha convertido en una herramienta clave para transformar ambientes y emociones. Impulsadas por estudios de bienestar y sostenibilidad, las tendencias cromáticas actuales favorecen espacios personalizados, priorizando armonía y confort visual. Estas paletas buscan crear ambientes acogedores, especialmente en entornos urbanos donde la luz natural es limitada.
Los pintores en la ciudad han observado un incremento en la demanda de tonos como beige cálido, topo claro y grises verdosos, reflejando un cambio en las preferencias hacia paletas que combinan necesidades funcionales y estilísticas contemporáneas. Se busca evitar contrastes agresivos, optando por matices suaves que añaden profundidad sin saturar visualmente.
Los colores inspirados en la naturaleza, como los tonos tierra y arcilla, han ganado popularidad al transmitir calma y facilitar combinaciones decorativas versátiles, lo cual es esencial para el bienestar de los habitantes. Se ha comprobado que el color impacta directamente en el estado de ánimo, incentivando la elección de tonalidades que modulan sensaciones en diferentes ambientes del hogar.
Las combinaciones de colores están tomando un giro más atrevido pero controlado, con mezclas de verdes y rosados empolvados, o grises con mostazas, siempre buscando una baja saturación y una decoración unificada. La sugerencia es experimentar con los colores en el espacio antes de tomar decisiones finales, considerando cómo la iluminación y el mobiliario pueden cambiar la percepción.
Con el auge del teletrabajo, el color se ha transformado en un recurso para definir espacios multifuncionales sin barreras físicas, facilitando la organización y creación de áreas diferenciadas dentro de una misma habitación. Además, hay un renovado interés por colores clásicos como el azul marino y el verde botella, aplicados de forma estratégica para aportar elegancia moderna.
La preferencia por pinturas ecológicas ha aumentado, priorizando productos con bajo contenido en compuestos orgánicos volátiles para beneficiar tanto al ambiente como a la salud. La sostenibilidad es ahora un pilar fundamental en la elección cromática.
El futuro del color en los hogares apunta a una personalización consciente, donde los tonos elegidos reflejan emociones y hábitos de vida, haciendo del color un vehículo de expresión y transformación esencial para la experiencia del hogar.