El presidente de Castilla-La Mancha se ha sumado al reciente ataque coordinado de los líderes del Partido Popular (PP) contra el gobierno central, solicitando la convocatoria de elecciones anticipadas y expresando su rechazo al sistema de cupo. Este movimiento se enmarca dentro de una estrategia más amplia de los llamados barones del PP, quienes critican la gestión del gobierno en asuntos fiscales y territoriales, sosteniendo que el sistema actual de financiación autonómica es injusto y desigual. Se espera que estas acciones incrementen la presión sobre el ejecutivo, en un contexto donde las tensiones políticas están al alza.
El desfase económico generado por el sistema de cupo, según los barones populares, pone en desventaja a comunidades como Castilla-La Mancha, al tiempo que beneficia a otras regiones con acuerdos fiscales especiales. El creciente clamor por la igualdad en la distribución de recursos ha sido una piedra angular en las críticas del PP, que considera que un nuevo modelo de financiación es necesario para garantizar equidad entre comunidades. La movilización de líderes regionales del partido ha sido contundente, marcando una postura firme que busca influir en la agenda política nacional y resaltar las divergencias con las políticas del gobierno central.
Leer noticia completa en El Mundo.