Madrid ha inaugurado su nueva línea de tranvía, un proyecto largamente esperado que ha contado con una inversión de 150 millones de euros. La línea, que conecta el centro con los barrios periféricos, busca aliviar la congestión del tráfico y reducir las emisiones de carbono. El alcalde de la ciudad ha destacado que esta iniciativa forma parte de un plan más amplio de movilidad sostenible, que incluye la implementación de carriles bici y la mejora del transporte público. Además, se espera que el nuevo tranvía beneficie a más de 200.000 residentes, facilitando sus desplazamientos diarios y mejorando la calidad de vida en la capital.
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