El Juzgado de Instrucción número 1 de Badajoz ha decidido el internamiento en régimen cerrado para los tres adolescentes detenidos por el asesinato de una educadora social en una vivienda tutelada de la misma ciudad. Según el Tribunal Superior de Justicia de Extremadura, los jóvenes, de entre 14 y 15 años, fueron capturados en Mérida tras ser interceptados primero en Lobón, lugar donde sufrieron un accidente automovilístico en el vehículo de la víctima. Las autoridades siguen las diligencias judiciales por presuntos delitos de homicidio, robo con violencia y contra la seguridad vial. Destaca que uno de los menores había estado desaparecido durante una semana, siendo localizado poco antes en Villafranca de los Barros por la Guardia Civil.
La trágica muerte de la profesional ha suscitado una fuerte reacción en Badajoz, donde más de cincuenta trabajadores de centros de menores y pisos tutelados, apoyados por representantes sindicales, se concentraron para demandar mejoras en seguridad y solicitar una reducción de la edad penal. Los manifestantes recuerdan que llevan meses reclamando soluciones ante el aumento de la agresividad entre los menores. Una educadora del mismo centro, que prefirió permanecer anónima por seguridad, reveló que la situación era insostenible desde hacía dos semanas, con incidentes frecuentes de robos y fugas, añadiendo que la tragedia “le podría haber ocurrido a cualquiera”.
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