Las organizaciones multinacionales se enfrentan al complejo desafío de gestionar eficazmente una fuerza laboral y operaciones distribuidas en diversos países, culturas y lenguas. Mantener la coherencia y alineación en operaciones globales resulta complicado, especialmente al actualizar y compartir documentos y procesos empresariales. Errores o retrasos en estas traducciones pueden acarrear pérdidas de productividad, ineficiencias operativas o incluso interrupciones significativas en el negocio. Por ello, asegurar la disponibilidad puntual y precisa de documentos en el idioma nativo de los empleados es esencial para mantener una operación eficaz.
Para abordar este reto, Amazon Web Services (AWS) propone una solución que automatiza la localización de idiomas mediante la traducción de documentos. La solución combina tecnologías serverless de AWS con Amazon Bedrock, un servicio totalmente gestionado que proporciona modelos avanzados de inteligencia artificial de diversas empresas líderes en el sector. Amazon Bedrock, accesible a través de una API sencilla, permite desarrollar aplicaciones de inteligencia artificial generativa de manera segura y responsable.
La solución se apoya en AWS Step Functions para coordinar la traducción de documentos en idiomas como inglés, francés y español, empleando funciones de AWS Lambda y el servicio de Amazon Translate. Aunque Amazon Translate admite 75 idiomas, este ejemplo se centra en tres. Amazon Bedrock refina la traducción, asegurando que el contenido sea fluido y natural. Al utilizar tecnologías gestionadas y sin servidores, las organizaciones eliminan gastos de infraestructura y se benefician de un modelo de facturación basado en el consumo.
El proceso de traducción y estandarización de documentos consta de varios pasos. Inicialmente, el usuario carga el documento fuente en un bucket de Amazon S3, que divide los archivos según el idioma. Una vez que el documento está en la nube, un flujo de trabajo en Step Functions se activa mediante notificaciones de eventos de S3. Luego, AWS Lambda recupera el documento, lo almacena temporalmente y usa la API de Amazon Translate para traducirlo.
Posteriormente, otra función de Lambda consulta Amazon Bedrock para verificar que se mantenga la intención, estilo y tono del documento original. Finalmente, a través de Amazon SNS, se notifica al usuario que el proceso ha concluido, permitiéndole descargar el documento traducido desde el bucket de salida.
Además, la implementación completa de esta solución está disponible en GitHub, proporcionando el código necesario para su despliegue en cuentas de AWS. Estas capacidades permiten a las organizaciones mejorar la comunicación y la coherencia en sus operaciones globales, asegurando que los empleados tengan acceso a la información que necesitan, cuando la necesitan. En un entorno cada vez más globalizado, herramientas como esta son esenciales para mantener una fuerza laboral cohesionada e informada, permitiendo a las empresas concentrarse en sus objetivos comerciales sin el lastre de gestionar infraestructura de TI adicional.