Las Fuerzas de Operaciones Especiales ucranianas han confirmado que las tropas norcoreanas, que habían estado luchando junto a las fuerzas rusas en la región de Kursk, han desaparecido de la línea de contacto donde solían enfrentarse con el ejército de Kiev. Según el portavoz de las fuerzas especiales ucranianas, Oleksandr Kindratenko, no ha habido presencia de tropas norcoreanas en la zona durante aproximadamente las últimas tres semanas. Kindratenko sugirió que es probable que estas fuerzas hayan sido forzadas a retirarse tras sufrir considerablemente pérdidas, lo que coincide con la información difundida previamente por fuentes anónimas ucranianas y estadounidenses.
El contexto de la retirada ha sido corroborado por el asesor presidencial ucraniano, Mijailo Podoliak, quien señaló que algunas unidades norcoreanas fueron retiradas del frente de Kursk después de perder el 40% de sus efectivos en combate. A esto se suma la declaración del presidente ucraniano, Volodimir Zelenski, quien cifró las pérdidas norcoreanas en más de 4,000 soldados. Según los informes de inteligencia de Kiev, Seúl y Washington, Corea del Norte había desplegado inicialmente unos 10,000 soldados para apoyar a las fuerzas rusas, con su primera entrada en combate registrada a principios de noviembre.
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