Las recientes decisiones del gobierno de Estados Unidos, bajo el liderazgo de Donald Trump, han generado inquietud en las agencias de la Organización de las Naciones Unidas (ONU). La retirada del país norteamericano de la Organización Mundial de la Salud (OMS) y el Acuerdo Climático de París, oficializada el lunes mediante decretos presidenciales, marca un punto crítico que podría debilitar significativamente las respuestas globales a problemas urgentes como la salud pública y el cambio climático.
La OMS, una de las organizaciones más afectadas por esta decisión, ha manifestado su pesar y ha urgido al gobierno de Trump a reconsiderar su postura. Desde 1948, Estados Unidos ha sido un pilar fundamental para la OMS, contribuyendo con el 18% de su presupuesto en 2023. Esta retirada no solo limita la capacidad de la organización para intervenir en crisis humanitarias en lugares como Gaza, Yemen y Afganistán, sino que también podría comprometer la eficacia de sus operaciones en emergencias sanitarias a nivel global, según han señalado tanto representantes de la OMS como de otras agencias de la ONU.
A pesar del descontento, la OMS, liderada en parte por la doctora Maria Van Kerkhove, asegura que continuará con su misión de apoyo a comunidades necesitadas. Desde la Oficina de Asuntos Humanitarios de la ONU, Jens Laerke ha destacado la importancia vital de la OMS y su impacto positivo en la salud global.
Con respecto al Acuerdo de París, el alejamiento de Estados Unidos ha encendido alarmas dentro de la ONU. Autoridades de la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático han advertido de las consecuencias económicas y ambientales de esta decisión. La transición a energías renovables es vista no solo como una necesidad ambiental, sino como una oportunidad económica que Estados Unidos podría estar pasando por alto.
La Organización Meteorológica Mundial recuerda que las repercusiones del cambio climático ya están afectando económicamente a Estados Unidos, con un aumento en la frecuencia y severidad de desastres naturales. Este mensaje resalta la urgencia de que todos los países, especialmente los más influyentes, cumplan sus compromisos internacionales.
La comunidad internacional, atenta a los movimientos de Estados Unidos, reconoce que su participación continua es fundamental para enfrentar los desafíos del cambio climático y las emergencias sanitarias de manera eficaz. En este sentido, el retorno de Estados Unidos a estos marcos de cooperación se considera crucial para el futuro global.